Nadie puede negar la importancia que ha alcanzado el automóvil, desde que se inventara en 1886, hasta nuestros días. El coche se ha convertido en parte del mantra social “familia-casa-coche”. Y lo ha hecho porque supone una gran comodidad y una mejora en la calidad de vida. Los coches han pasado a ser un elemento fundamental de las familias. Dada la importancia que tienen, es conveniente llevar un mantenimiento adecuado de cada una de sus partes, lo que permitirá alargar su vida de uso.

Los vehículos deben pasar revisiones cada cierto tiempo. Los talleres mecánicos son nuestros mayores aliados a la hora de tener el coche a punto. Por supuesto que, un buen cuidado del auto permitirá que este dure más años, que las reparaciones sean menos frecuentes y que resulten mucho menos costosas. Aun así, es inevitable que, pasado un tiempo, el vehículo que nos ha acompañado en tantos viajes comience a sufrir averías de diversa gravedad. Llegados a este punto, hay dos opciones: cambiar de coche, alternativa mucho más cara y tremendista, o la opción más común y la que supone un mayor ahorro para la economía doméstica, arreglarlo. Lo normal es que sustituyendo la pieza estropeada, el coche vuelva a funcionar perfectamente. 

Si decides arreglar el coche ¿es mejor hacerlo con recambios originales o con recambios de segunda mano? Veamos.

Recambios originales

La opción más lógica para aquellos que quieren mantener el coche casi como el primer día. Sustituir una pieza antigua por una completamente nueva, de la casa, permite dejar el vehículo en un estado óptimo. También es una elección inteligente para los coches que salieron del concesionario hace poco tiempo y a los que aún les quedan muchos kilómetros por recorrer.

Un recambio original tiene, a priori, más durabilidad que uno usado. 

Genera una garantía y una confianza en los conductores que no dan piezas de segunda mano.

El principal problema reside en el precio, ya que las piezas a estrenar suelen ser mucho más caras.

Recambios de segunda mano

Si estás pensando en cambiar de coche dentro de poco, quizás, lo más recomendable sea utilizar piezas de segunda mano debido a que su precio puede ser muy inferior al de los recambios originales.

Las piezas de segunda mano, aunque tienen un ciclo de vida menor que el de las nuevas, deberían durar lo suficiente hasta que decidas cambiar de coche. 

Cuando compres productos de segunda mano, asegúrate de comprar piezas en buen estado. El vendedor debe ser de confianza. Intenta conseguir la pieza a alguien de quien puedas tener referenciaspositivas. 

Una alternativa es utilizar piezas de intercambio. Cuando una pieza se estropea puedes cambiarla por otra que ya haya sido arreglada. La fábrica se queda esa pieza defectuosa para arreglarla y volverla a cambiar, una vez reparada, por otra estropeada y así sucesivamente. 

Ninguna de las dos opciones es mejor que la otra. Eso dependerá de las necesidades y de los planes de cada uno de los usuarios. En tu caso concreto, piensa y analiza qué es lo que más te conviene.